sábado, 25 de mayo de 2013

Brian Chapman Memorial 600 - Español

Conociendo Gales
Dejadme que lo diga directamente. Este ha sido el mejor brevet que he rodado en UK. El Brian Chapman Memorial 600 es una gran ruta; cruza Gales del sur-este al noroeste y vuelta. Esto significa que los paisajes son maravillosos, que hay un montón de subidas y que las carreteras son geniales. También es una ruta bien pensada, muy fácil de seguir y con los controles bien espaciados (siempre alrededor de 75Km entre controles), algunos de ellos en sitios increíblemente bonitos. Pero no sólo eso, en la mayoría de los controles se ofrecía comida gratis a los ciclistas y en algunos de ellos, en los que tenía sentido, también se ofrecían camas gratis.

Si a todo eso le sumas que tuve la ocasión de conocer y rodar todo el brevet con Alberto, conocer a Lucy (los autores detrás del blog Machacas on Wheels) y que todos tuvimos un fin de semana con un tiempo magnífico, es fácil de entender porqué pienso que este ha sido uno de los mejores fines de semana de ciclismo que he pasado.

Pero no todo fue fácil. El 400 de la semana pasada me había dejado pensando que mi estrategia de darlo todo en los primeros 200km y sobrevivir el resto de la ruta no era probablemente la mejor de las estrategias si "el resto de la ruta" son 400Km con un montón de subidas. Una semana muy ocupado en el trabajo significó que acabé llegando a la habitación que había reservado cerca de la salida a las 11 de la noche. Me iba a despertar a las 5 de la mañana por lo que no iba a ser precisamente una noche de descanso. Mis últimos pensamientos antes de dormir eran todavía de dudas sobre la estrategia a seguir en la mañana siguiente.

Llegué al control de salida 15 minutos antes de la hora de salida. Me hice con mi brevet y ya estaba listo para la fiesta cuando me encontré con Alberto...

Alberto y yo somos seguramente los dos únicos españoles que hacemos Audaxes en UK, y es curioso como llegamos a conocernos.

Buscando información sobre la Paris-Brest-Paris Alberto encontro este blog hará como dos años. Comentó en uno de los posts y yo caí en la cuenta de que el tenía un blog con Lucy, Machacas on Wheels; un blog genial sobre Audax por lo que empecé a seguirles. Un par de meses más tarde me pareció reconocer a Alberto entre los ciclistas que empezaban la Etape Cymru 2011. No estaba seguro de si era él pero cuando comprobé en casa su número de dorsal se confirmó. Curiosamente, hará como un año, iba yo en un tren hacia Waterloo y vi a Alberto y Lucy con sus bicicletas dos o tres andenes más allá en la estación de Clapham Junction. Leíamos y comentábamos nuestras respectivas crónicas y nos cruzábamos, pero no fue hasta esa mañana que finalmente nos conocimos en persona.

Y fue un alivio porque me dio la excusa perfecta para abandonar definitivamente mi plan original y cambiarlo por un más razonable "vamos a empezar a rodar con Alberto y a ver como evoluciona el tema".
Todos preparados para salir
6 am de la mañana y allá vamos, 2 españoles entre 120 ciclistas, un evento realmente grande para la escala de los Audax, el más grande de los que yo he estado si descuento la Paris-Brest-Paris.

La primera etapa era fácil. 72Km con un par de subidas fáciles rodadas en pequeños grupos cuando todo el mundo se siente fuerte. Una buena oportunidad para saludar a las muchas caras conocidas (por desgracias con muy pocos nombres asociadas a ellas) y para confirmar que rodar con Alberto iba a ser genial. Teníamos ritmos similares y su conversación era interesante.

Brompton Audax Edition que usó Wilkyboy
Cuando llegamos al primer control (8:45) era demasiado temprano para parar por mucho tiempo por lo que decidimos sellar la brevet y seguir hasta el siguiente control (154Km). Cuando lo pienso suena un tanto surreal: "Parar con "sólo" 72km es demasiado pronto", "Si, vamos ha seguir rodando cuatro horas más y paramos en el kilómetro 154Km"; de locos, pero me apuesto a que fue lo que la mayoría de los ciclistas pensaron e hicieron.

Lo que no sabíamos, porque no teníamos una idea clara del perfil de la ruta más allá de que habría muchas subidas, es que en esos 82km nos íbamos a encontrar con la primera gran subida. Era una subida inusual por estas tierras; buen asfalto, subida tendida y larga. A Alberto le costó un poco debido a que empezó a tener problemas con su estómago, pero en general la subimos muy bien. Eran las 12:25 y habíamos llegado al segundo control.

El perfil de la ruta con un montón de subidas
El plan era parar a comer algo rápido y seguir ruta. Pero el plan no funcionó. Había una cola en el café donde había que sellar que aunque no era muy larga se movía muy despacio por lo que nos llevó más tiempo del deseado conseguir la comida. Pero, hey, no había prisa. A relajarse y a disfrutar de la sopa de puerros y patatas y de la mitad de la ensalada de pasta que llevaba.

Sopa de puerros y patatas, ensalada de pasta, pan, un scone, batido de chocolate y agua
Lo bueno de tener el control en el alto de una colina es que se empieza bajando, y eso ayuda.

En un abrir y cerrar de ojos nos hicimos otros 70Km. Eso no significa que no nos enteramos de esa pedazo subida que pasamos, pero hicimos la mayor parte de ella a rueda de este ciclista.

El Mozart del marcar ritmo
Se había parado en una gasolinera al final del descendo y se nos unió cuando le adelantábamos. Al poco ya estaba delante marcándonos ritmo. Se unieron dos o tres ciclistas más y acabamos siendo un pequeño peloton, todos a su rueda. Nadie le daba un relevo, siempre era él el que iba a rueda. Alberto y yo lo comentamos y recuerdo que dije "Porque iba alguien a darle un relevo, nos está llevando al ritmo perfecto". Recuero que me sentí como un Salieri escuchando a Mozart, reconociendo la belleza de su arte, manteniendo un ritmo perfecto tanto en el llano como en las subidas y las bajadas.  (update 26/5/2013, Me acabo de enterar de que Tomsk es Mozart)

Pensé que iba a llevarnos en pelotón hasta el siguiente control pero en un cierto punto de la subida le di un relevo y me puse yo al frente del grupo. Si me hubieses preguntado habría jurado que yo mantuve el mismo ritmo, pero lo cierto es que para cuando llegamos a la cima de la subida el grupo estaba hecho pedazos. Esta claro que todavía me queda que aprender en eso de marcar ritmo.

Sea como sea, como he dicho, esos 70Km volaron prácticamente sin esfuerzo hasta que cogimos el giro a la izquierda para empezar la subida de un kilómetro y medio que nos llevaría al siguiente contro. No era una subida brutal, pero facilmente tenía un desnivel del 10% y eso se nota.
La carretera que nos llevó al hostal Kings YHA
El control del hostal Kings YHA
El control estaba en el hostal Kings YHA y fue toda una sorpresa. En un valle profundo, rodeado de árboles, en un entorno místico y lleno de paz. En el medio de ese mágico lugar un hosta y en el hostal conocí a Lucy.

Lucy se había ofrecido voluntaria a ayudar en el evento mientras Alberto participaba (puedes leer la crónica de su experiencia ayudando en su blog). Lucy recibía a los ciclistas con una sopa de vegetales, pasta y un pudding de arroz. Ya habíamos comido en el segundo control, 70k antes, pero volvíamos a estar hambrientos por los que optamos por el menú completo, después de todo no había duda de que íbamos a quemar todas esas calorías; eran las cuatro de la tarde, teníamos 224Km en las piernas y nos quedaban otros 200 para estar de vuelta en el Kings YHA y poder dormir algo.

Segunda comida del día. Sopa de vegetales, pasta, pudding de arroz y leche.
La siguiente etapa era la más larga. 90Km sobre el papel que acabaron siendo 100 porque un puente estaba cerrado por obras y tuvimos que rodar 10k extra para poder cruzar el rio. Y en esos 100Km iba incluida otra subida considerable, unos 10km con una pendiente de un 2 o 3% Nada despreciable cuando tienes casi 300km en las piernas. Subíamos por un valle con un lago a la izquierda y a medida que íbamos subiendo las vistas se volvían más y más impresionantes.
Un ciclista durmiendo en el control de Bangor
Llegamos a Bangor a las 21:20. Estábamos en el punto más lejano de la ruta y era el momento adecuado para tomar la primera cena del día.

Sopa de tomate y pasta y leche
Alberto esperando por su cena
Kond, con chaqueta negra, en la izquierda, de espaldas a la cámara, hablando con Mel Kirkland.
Para cuando estábamos listos para ponernos en marcha ya había oscurecido y la temperatura había bajado considerablemente por lo que nos pusimos capas extra de ropa y encendimos las luces. Nos quedaban 82km para estar de vuelta en el Kings YHA y esperábamos llegar sobre las dos de la mañana, 4 horitas rodando en la noche.

Y fue un tramo bastante bueno. Las condiciones eran muy buenas, un poquito de frio, pero no mucho; Tampoco mucho tráfico en las carreteras y éstas seguían siendo buenas. En algunos momentos el sueño nos atacaba, pero una subida aquí y allá y un par de paradas para mear o coger fruta fueron suficientes para mantenernos despiertos hasta la que proximidad del control nos creó ese estado de excitación que hace que te vuelvas a sentir fuerte otra vez cuando en realidad ya no lo estás.

Sintiéndonos fuertes y no estándolo nos tocó subir el kilómetro y medio que nos llevó de vuelta al Kings YHA y eso se notó. Para cuando llegamos yo estaba realmente cansado y deseando irme a la cama a dormir algo. Sellamos nuestra brevet a la 1:55.

Mientras nos tomábamos nuestra segunda cena nos enteramos que las camas estaban disponibles, pero que cada ciclista disponía de tres horas para dormir. Después de esas tres horas nos despertarían para que dejásemos la cama a otro ciclista. Por supuesto el que quisiera levantarse antes se le despertaría antes. No fue nuestro caso, pero estoy seguro que más de uno no durmió las tres horas.

Al final me fui a la cama a las 2 de la mañana. Sólo tenía tres horas para dormir por delante por lo que no perdí el tiempo, cerré los ojos y al segundo siguiente estaba profundamente dormido.

En un momento de la noche la alarma de un móvil empezó a sonar. Beep, beep, beep. Me arrancó de los brazos de morfeo y la alarma seguía sonando. Beep, beep, beep. ¡Venga hombre apágala! pensé. Estaba en una habitación con seis ciclistas más y no tenía ni idea de quien era el móvil que estaba sonando pero parecía que todo los demás no se enteraban, dormían plácidamente. Al final la alarma se paró por lo que pude relajarme y volver a dormirme. Pero sólo para que el sonido de la alarma me volviese a despertar. Beep, beep, beep. No me lo podía creer. Beep, beep, beep, Y todo el mundo durmiendo como si nada estuviese pasando. Por suerte el beep se interrumpió de golpe. El dueño del móvil se había despertado y paró la alarma. Un segundo después yo estaba otra vez dormido.

A las cinco me levanté sin que viniesen a despertarme. Me fui directo a la ducha y eso me ayudó a refrescar el cuerpo y la mente. Me puse ropa limpia y todo parecía como un nuevo día. Muesly con leche y una tostada para desayunar. Y en ello estaba cuando apareció Alberto. Cuando me preguntó que tal había pasado la noche le conté el detalle de la alarma y contestó. "Si, era mi móvil. Estaba tan dormido que no lo oía". ¡¡¡Pero tiiiio podría haberte matado por esto!!! nos reímos de la anécdota.

Estaba claro que estaba empezando a ser la hora punta del desayuno. Todo el mundo se estaba levantando y Lucy estaba muy ocupada sirviendo desayunos a todos. Sin prisa alguna nos fuimos preparando para empezar el segundo día. Nos despedimos, nos subimos a las bicicletas y empezamos a pedalear.

Siempre pasa lo mismo. Al principio mi cuerpo rechaza la idea de pedalear. No importa que yo esté listo, mis piernas no lo están, habría que tomárselo muy tranquilamente al principio.

Pero ese principio fue muy corto porque muy pronto nos encontramos subiendo algo que nunca pareció una colina, una de esas subidas que esperas que se acabe después de la siguiente curva, pero que terminan siendo 8km de subida con 350m de desnivel. E inmediatamente después del descenso otra colina. Esta era justo lo contrario, una de esas subidas que ves venir desde lejos. Esas que cuando se van acercando se van viendo más y más empinadas. De hecho cerca del alto de la coluna pudimos ver a un ciclista que subía andando y empujando su bici. No era una subida super pendiente, pero cuando llegué a la cima jadeaba buscando aire como si lo hubiese sido. Desde la cima de la segunda colina sólo nos quedaba el descenso hasta el siguiente control. Fácil.
Segundo desayuno del día
Habíamos rodado sólo 65km y ya estábamos hambrientos de nuevo por lo que me alegre mucho, pero mucho de que me ofreciesen salchicha, bacon y beans en una tostada. Lo complementé con una ración de mi ensalada de pasta y un par de vasos de leche. Energía para el cuerpo.

Lucy, Alberto y la relajada atmósfera en el control
Lucy también estaba en el control. Nos contó que habían cerrado el control de Kings YHA, habían limpiado y empaquetado y que se habían venido a ayudar. Como el control no estaba muy ocupado pudo sentarse con nosotros un rato a charlar tranquilamente.

La siguiente etapa eran 80km y cuando nos decidimos a ponernos en marcha se nos unieron dos o tres ciclistas más. Rodamos todos juntos hasta Newton donde empezó una subida. Al principio no era muy empinada y ni siquiera parecía que fuese a ser una subida larga. Otra vez, era una de esas subidas que parece que se va a acabar después de la siguiente curva. Pero no lo era. Seguía subiendo y subiendo. No muy pendiente, pero siempre subiendo. Yo rodaba en cabeza rodando a lo que me parecía un ritmo fácil, pero tres o cuatro kilómetros después de haber empezado a subir el grupo ya lo componíamos Alberto y yo nada más. La ruta tenía un giro a la izquierda y la subida se ganó en pendiente, todavía nada salvaje, pero suficiente para que empezáramos a quejarnos. Y después de ese trecho seguimos subiendo y subiendo.

No estoy seguro de si fue porque la subida parecía constantemente que se iba a acabar y luego nunca acababa o porque no tenía ni idea de cuanto de larga iba a ser o puede ser que fuese que estábamos subiendo muy despacio (aunque habíamos descolgado a tres ciclistas) pero lo cierto es que me pareció que tardamos una eternidad en llegar a la cima. Un cálculo rápido sugirió que habíamos subido durante 13km y que estábamos en el punto más alto de la ruta, a unos 500m sobre el nivel del mar. No esta mal para algo que nunca pareció una colina cuando tienes 475km en las piernas.

El descenso fue bienvenido por el cambio que representaba y suficientemente corto para estar seguro de que no habíamos bajado todo lo que habíamos subido. Y en ese punto entramos en crisis...

Siempre hay una. Un momento donde todo parece ir mal, donde te sientes cansado y lento. El calor del del sol de medio día me dormía y Alberto estaba hambriento. Estábamos en crisis, costaba mantenerse en un buen ritmo.

El truco es reconocer las crisis y gestionarlas. Le pregunté a Alberto si estaba interesado en el fútbol y como su respuesta fue no empezamos a hablar de ciclismo y la conversación me despertó. Una parada rápida para asaltar la tienda de una gasolinera nos dio la oportunidad de comer y beber. Una pequeña subida después de la parada y la crisis ya se había pasado.

Enseguida llegamos al último control. Eran las 2:45 de la tarde, hora de comer en España... Me comí el resto de mi ensalada de pasta, una plátano, una bolsa de doritos y un helado (magnum classic). Estábamos sentados en un prado, el cielo estaba azul, el sol brillaba en el cielo y la temperatura era ideal. La tentación de echarnos una siesta era muy, muy grande; pero la soportamos. Todavía me pregunto como lo hicimos, pero, sea como sea, sin siesta y de vuelta a nuestras bicis para la última etapa. Teníamos por delate 78Km, la idea es que acabaríamos sobre las 19:00.

La primera parte de la etapa fue un rompepiernas. Suuuube y baja, suuuube y baja. Empinado hacia arriba, rápido hacia abajo. Rápido hacia abajo, pero no suficientemente rápido para pasarte la siguiente subida sin esfuerzo. Imposible coger ritmo. Ni me molestaba en poner el plato grande en las bajadas porque sabía que iba a necesitar el pequeño en las subidas. Nos cansamos de este jueguecito y empezamos a quejarnos. Las vistas ya no estaban siendo nada del otro mundo, la carretera ya no era tan buena y no lo estábamos disfrutando tanto. Suuuube y baja, Suuuube y baja. Sube, sube, sube, sube, baja, baja, baja y baja y llegamos a Monmouth.

No hicimos un tanto de lio al pasar por Monmouth. La hoja de ruta decía una cosa y el GPS otra. Un par de giros equivocados, un par de paradas para comprobar y nos decidimos a seguir el GPS. Por suerte vimos a un grupo de ciclistas que nos seguía y muy pronto el GPS y la hoja de ruta volvieron a estar alineados.

Reconocí a Judith Swallow (creo que es la mujer con más super brevets - 1.000km o más - del mundo) en el grupo que nos seguía. Aunque no nos siguieron durante mucho tiempo porque rodaban más rápido que nosotros.

Nos adelantaron, Alberto sugirió ponernos a su rueda y eso hicimos. A su rueda no parecía que rodasen tan rápido la verdad, incluso teniendo en cuenta que la carretera se empezaba a empinar.

Estábamos a unos 23km del final; no se porque ni como pero me encontré en frente del grupo rodando en paralelo con otro ciclista y de repente sucedió...

Las endorfinas inundaron mi cerebro y todo se tornó perfecto. La carretera tenía un piso perfecto, la subida no era muy empinada, el valle que estábamos cruzando era impresionantemente bonito, el sol brillaba en el cielo y yo encabezaba el grupo a un ritmo que me parecía fácil. No me sentía nada cansado, de hecho me sentía como si pudiese sprintar en la subida, casi lo deseaba.

Mi primer intento de sacar una foto a una abadía derruida (Tintern Abbey) sin parar
Segundo intento (Tintern Abbey). Fíjate en el cielo, en el bosque a la izquierda, en la calidad de la carretera. Todo perfecto.
Los 20 kilómetros volaron y un rápido descenso nos llevó a control de llegada 37 horas más tarde y 627km después de haber salido el día anterior.


Lucy nos estaba esperando en el contro. Nos sellaron las brevets, comimos algo, para mi un sandwich de bacon recién hecho y nos relajamos en el buen ambiente que había en el control. Todo el mundo parecía feliz.

Como decía este ha sido el mejor brevet que he rodado en UK. Todo fue perfecto (la compañía, la ruta, el tiempo, la organización) and fue el perfecto ensayo para la LEL. ¿Qué más se le puede pedir a un fin de semana de ciclismo?

Mis dos últimos brevets combinados. Un sábado Severn Across 400 y el siguiente fin de semana BCM 600
Números, número, números:
  • Kilómetros: 626,85
  • Desnivel acumulado: 8.663 mucho desnivel
  • Velocidad media en movimiento: 22,5 km/h (la media oficial del Pakefte)
  • Velocidad máxima: 73,4 km/h
  • Tiempo total: 37:00:00 (Si, exactamente 37 horas)
  • Tiempo en movimiento: 27:43:49
  • Tiempo parados: 9:16:11 (de los que 3 horas fueron durmiendo)
  • Velocidad media global: 16,94 km/h
  • Calorías consumidas: 13.076
  • Pulsaciones medias: --
  • Pulsaciones máximas: --
  • Cadencia media: --
  • Cadencia máxima: --
  • Potencia máxima: 580w
  • Potencia media: 140w
  • Mi bici tiene: 22.711,20 Km
  • Link a Strava: http://app.strava.com/activities/55245726
Actualización 1/6/2013
La crónica de Alberto la podéis encontrar en la entrada Bryan Chapman Memorial 600: the rider experience. Está en inglés pero si aunque no entiendas inglés sólo por las fotos ya merece la pena (y no porque yo salga en varias de ellas, ese de azul, el uniforme oficial del Pakefte)

Además un video que uno de los participantes ha hecho sobre la ruta. Me encanta lo bien que transmite el espíritu de los Audax y lo sonrientes que salen todos los ciclistas (yo salgo en el minuto 5:51).


A cuidarse
Javier Arias González

Brian Chapman Memorial 600 - English

Getting to know Wales
Let me said it straight. This was the best Audax event I have ridden in the UK. The Brian Chapman Memorial 600 is a great ride; it crosses Wales from south-east to north-west and back. This means the scenery is amazing, there are lots of good climbs and the roads are great. It is also a well planned route, very easy to follow, with well spaced controls (always around 75Km between controls), some of them in unbelievable beautiful places. But not only that, in most of the controls free hot food was offered to riders and some of them, the right ones, free beds were also offered.

If, to all that, you add that I had the opportunity to meet and ride the whole event with Alberto, meet Lucy (the authors behind Machacas on Wheels) and that we all had a weekend with great weather it is easy to understand why I think this has been one of the best cycling weekends I ever had.

But great things don't come easy. Last weekend's 400 let me thinking that my strategy of going all out for 200K and then surviving the rest of the ride was not probably the best strategy if the "rest of the ride" is a 400K with lots of climbs. A very busy week at work meant I ended up arriving to the room I had booked near the head quarters around 11pm. Wake up was going to be at 5am so not exactly the most resting night. My last thought before falling sleep was still a doubt about my strategy for the next morning.

I got to the head quarters 15 minutes before the start. Got my brevet card and ready I was for the party when I met Alberto...

Quite possible Alberto and I are the only two Spaniards riding Audaxes in the UK and it is curios how we got to met on this morning.

Searching for information about audaxes and Paris-Brest-Paris Alberto found this blog around two years ago. He commented in one of the posts and then I realized he had a blog with his partner, Lucy, Machacas on Wheels; a great blog about Audax rides, so started to follow them. A couple of months later I thought I had recognized him among the cyclists starting Etape Cymru 2011 I wasn't sure at the time, but it got confirmed when I checked at home his dorsal. Funny enough, like a year ago, I was on a train towards Waterloo and saw Alberto and Lucy with their bikes two or three platforms away in Clapham Junction. We were reading and commenting each other's reports but it was not until this morning when we finally met in person.

And that was a relief because it gave me the perfect excuse to definitively abandon my original plan and switch it for a much more reasonable "lets start riding with Alberto and will see how it evolves".
Everyone ready to go
6 am in the morning and there we go, two Spaniards among 120 riders, a pretty big event in Audax scale, the biggest I have ridden if I don't count Paris-Brest-Paris.

The first stage was an easy one. 72Km with just a couple of easy climbs, ridden in small groups when everyone still feels strong. A great opportunity to say hello to many known faces (unfortunately with few names attached to them) and to confirm that riding with Alberto was going to be great. We had similar paces and his conversation was interesting.
Brompton Audax Edition that was ridden by Wilkyboy
By the time we arrived the first control it was too early (8:45) to stop for long time so we agreed on get the brevet stamped and keep it going until the next control (154Km). When I think about it I know it sounds surreal: "stopping with "only" 72Km is too early", "Yeah, lets keep riding for four hours and stop at 154km"; crazy, but I bet that's what most of the riders thought and did.

What we didn't know, because we had not a clear idea of the profile of the route, is that in those 82K we were going to find the first big climb. It was an unusual climb; good surfaced road, steady and long. Alberto struggled a bit due to problems with his stomach but overall we did great. It was 12:25 and we had arrived the second control.
The profile, plenty of hills
The plan was to stop, eat something quick and keep it going. But the plan didn't work out. There was a queue in the caffe and it was moving very slowly so it took us longer than planned to get the food. But, hey, we were not in a rush. Relax and enjoy the leek and potato soup and half of the pasta salad I was carrying.

Leek and potato soup, pasta salad, bread, a scone, chocolate milk and water. Plenty of fuel
The good thing about having a control in the top of a climb is that you start descending, and that helps.

A blink of the eyes and another 70k had gone. This doesn't mean we didn't notice the big climb but we did most of it sitting on the wheel of this rider:
The Mozart of the pace making
He had stopped at a petrol station at the end of the first descend. He joined us and very soon he was leading us. More cyclists joined the group and we ended up being a handfull of riders sitting on his wheel. No one was taking a turn, it was always him in the front. Alberto and I commented about it and I remember I said, why would someone going to take a turn? he is keeping the perfect pace. I remember I felt like Salieri listening to Mozart, recognizing the beauty of his art, keeping a perfect pace on the flat, uphill and downhill. (update 26/5/2013, I just learnt that Tomsk is Mozart)

I thought we were going to ride in that peloton until next control but at certain point of the climb I took a turn in front of the group. If you asked me I would have said I had kept the same pace, but the reality is that by the time we got to the top the group was all scattered. I clearly have a lot to learn on pace making.

Anyway, as said, these 70km went away almost without notice until we took the left turn to start the last kilometer and a half climb that took us to the control. It was not a brutal climb, but it easily had a 10% it certainly was noted.
The road that took us to the magical Kings YHA  Hostel control
Kings YHA  Hostel control
The control at Kings YHA Hostel was a great surprise. In a deep close valley, surrounded by trees; a mystical and peaceful place. And in the middle of that magical place there was a hostel and in the hostel  I met Lucy. Lucy had volunteer to help in the event while Alberto was riding it (you can read her report  of the experience here). She welcomed us with vegetables soup, pasta and rice pudding. We already had launch on the second control, 70k earlier, but we were hungry again so we went for the whole menu, there was no doubt that we were going to burn all those calories; it was 16:00 we had 224K in our legs and we still had another 200K to be back at Kings YHA before we could get some sleep.

Second lunch of the day. Vegetables soup, pasta, rice pudding and milk
Next stage was the longest one. 90Km on paper that ended up being 100Km because one bridge was closed and we had to ride 10Km extra to cross that river. And within those 100Km it was included just another big climb, 10Km at around 2 or 3% Not bad when you have almost 300km in your legs. We were climbing leaving the valley with a lake on our left. As we were gaining in altitude the views were becoming more and more magnificent.
A rider sleeping in Bangor's control
We arrived to Bangor at 21:20. That was the farthest point of the route and it was the right moment to have the first dinner of the day.
Tomato and pasta soup and milk
Kond and Alberto waiting for his dinner
Kond, black top, on the left with back to camera, chatting to Mel Kirkland.
By the time we were ready to go it was dark outside and temperature had dropped considerably so we put on extra layers of clothes and turned on the lights. We had 82Km to be back Kings YHA we were hopping to arrive around 2:00 am, 4 hours riding in the dark.

And it was a pretty good ride. We had excellent conditions, a bit cold, but not too much; not much traffic on the roads either and the quality of the roads was still very good. At times we were feeling a bit sleepy, but a climb here and there, a few quick stops to pee or to get food were enough to keep us awake until the proximity of the control generated in us that excitement that makes you feel strong again when you really are not strong anymore.

Feeling strong but not being strong anymore we climbed the kilometer and a half climb that took us to back to Kings YHA's control and that took its toll. When we finally arrived I was certainly tired and looking forward for some sleep. Our brevet got stamped at 1:55.

While we were having our second dinner we learnt that beds were available but each rider was allowed to sleep three hours. After those three hours you would be awaken to leave the bed to another rider. Of course if you wanted to be awaken earlier you were welcome. It was not our case, but I'm sure someone went for it.

I finally went to bed at 2:00. Only three hours of sleep ahead so didn't loose any time, closed my eyes and the next second I was deep sleep.

At certain point in the night someones mobile alarm went on. Beep, beep, beep. It took me out of Morpheus arms and the alarm was still beeping. Beep, beep, beep. Come on, turn it off!! I thought. I was in a room with six more riders and I had no idea whose mobile was beeping but it seemed like I was the only one noticing it. Finally the mobile stopped its annoying beep so I relaxed and fell sleep again. But only to be awaken again by the same mobile alarm. Beep, beep, beep. I couldn't believe it. Beep, beep, beep. And everybody was sleeping as if nothing were happening. Luckily the beep was interrupted abruptly. Finally the owner of the mobile was awaken and had stopped it. A second later I was sleeping again.

I woke up at 5:00. Went straight to the shower and that helped a lot to fresh my body and my mind. Put on a clean clothes and felt like a whole new day. Muesly with milk and a toast for breakfast. And when I was having it Alberto appeared. When he asked about how I had passed the night I said, it was great, only disturbed by someone's mobile alarm... Yeah, It was mine, he said. I was so deep sleep I didn't hear it, he added. Man, I could have kill you; we laugh about it.

You could tell this was becoming rush hour for breakfast. Everyone was getting up so Lucy was very busy serving breakfast to everyone. Without any rush we were getting ready to start the second day. Said goodbye, went on our bikes and started pedaling.

It always the same. At the beginning my body rejects the idea of pedaling. It doesn't matter if I'm ready, my legs are not so I take it very easy at the beginning.

But the beginning was very short because very soon we found ourselves climbing up something that never looked like a hill, one of those climbs that you are expecting it to finish after the next turn, but that endend up being a 8km climb with 350m of altitude gain. And immediately after the descend another climb. This was the opposite, one of those climbs that you see from far away. Those that when they are getting closer and closer they look more and more steep. In fact close to the top we could see a rider walking up his bicycle. It was not super steep climb but still it got me gasping for air when I reached the top. From the top of that second climb there was only the descend until the next control.
Second breakfast of the day
We had ridden only 65Km and we were hungry again so was very, very pleased when I was offered a sausage, bacon and beans on a toast. I completed it with a portion of my pasta salad and a couple of glasses of milk.
Lucy, Alberto and the relaxed atmosphere at the control
Lucy was also in this control. She told us they closed the control at Kings YHA, cleaned, packed and came to this control to help. Still the control was not busy so she had time to sit and chat with us.

Next stage was 80K and when we decide to go back to the route we were joined by two or three more cyclists. We all road together until Newton where a climb started. At the beginning it wasn't very steep and it didn't look like a big climb. Again, it was one of those climbs that seems to finish in the next turn. But it wasn't. It kept going up and up. Not very step, but always uphill. I was leading the group climbing at what looked to me like an easy pace but three or four kilometers into the climb and it was only Alberto and myself in the group. The route sheet got the instruction to take a road on the left and the climb became a bit more steep. Again, not super steep, but enough to make us complain. And after that section the climb kept going up and up.

I'm not sure if it was because the climb was looking like finishing in each turn and actually never finishing or because I had no clue how long the climb was going to be, maybe it was that we were riding very slowly (although we had dropped three cyclists) but the truth is it looked like it took us an eternity to get to the top. A quick calculation revealed we were climbing for 13Km and we were at the route maximum altitude, around 500m. Not bad for something that never looked like a climb when you have 475Km in your legs.

The descend was welcome for the change it represented and short enough to be sure we hadn't descended all we had climbed. And at this point we faced the crisis, we were finding it difficult to keep a good pace.

There is always one. A moment where everything seems going wrong, when you feel tired and slow. The warm midday sun was making me to feel sleepy and Alberto was hungry. We were in crisis.

The trick is to recognize the crisis and deal with them. I asked Alberto if he was interested in football and as he answered no we started to talk about cycling and the conversation woke me up. A quick rally to the shop of a petrol station and we had the opportunity to eat and drink. A tiny climb after that stop and the crisis was over.

Very soon we arrived to the last control. It was 2:45pm, Spanish lunch time. I went for the rest of my pasta salad, a banana, a bag of doritos and an ice cream (magnun classic). We were sitting on the field, the sky was sunny and the temperature was great. The temptation of taking nap was very strong, but we overcame it. I'm still wondering how we did it but, anyway, no nap and we were back on our bikes with the last stage ahead of us. 78Km to go and the idea that we would finish around 19:00.

The first part of this stage was, as Spanish cyclists say, a "rompepiernas" (something that breaks your legs). Up and down, up and down. Steep up, fast down. Fast down, but not fast enough to pass you through the next up. Impossible to get into a rhythm. I didn't bother to put the big the chainring when we were going down because I knew I was going to need the small one in the next up. We got tired of this game and we complained about it. The views were not that great any more, the road was not that good and we were not enjoying it that much. Up and down, up and down. Up, up, up, up and down, down, down, down, down and we made it to Monmouth.

We got a bit confused crossing Monmouth. The routesheet was saying one thing and the GPS another one. After a couple of stops and checks we decided to follow the GPS. Luckily we saw that a group of cyclists were following us and very soon the GPS and the routesheet were aligned again.

I recognized Judith Swallow (I think she is the woman with more super brevets - 1,000k or longer- in the world) in the group of cyclists that was following us. Although they were not following us for long because they were riding faster than us.

They passed us, Alberto suggested to jump on their train and so we did. Sitting on their wheel it didn't look they were riding that fast, even considering the road was starting to climb.

We were like 23km away of the finish; not sure why or how but I found myself in the front of the group riding in parallel with another guy and suddenly it happened...

The endorphins inundated my brain and everything looked perfect. The road had a perfect surface, the climb was not very steep, the valley we were crossing was amazingly beautiful, the sun was shining and I was leading the group at a pace that felt very easy to me. I wasn't feeling any tiredness in fact I was feeling like if I could sprint up the hill, I almost wanted to.

My first attempt to take a picture of a ruined abbey (Tintern Abbey) without stopping
Second attempt, Tintern Abbey. Look at the sky, the forest on the left, the quality of the road. Everything was perfect.
Those 20K flew away and a fast descend took us very quickly back to the head quarters 37 hours and 627Km after our departure the day before.


Lucy was waiting for us at the control. We got our brevet stamped got some food, a bacon sandwich for me, and relaxed a bit in the great atmosphere that was at the control. Everyone seemed to feel happy.

As said this was the best Audax event I have ridden in the UK. Everything went perfect (the company, the route, the weather, the organization) and it was the perfect rehearsal for LEL. What else can be asked for in a cycling weekend?
My two last Audaxes combined. One Saturday Severn Across 400, following weekend BCM 600 
numbers, numbers, numbers:
  • Kilometers: 626.85
  • Climbing: 8,663 that's lots of climbing
  • Moving Avg speed: 22.5 km/h (Pakefte's official average speed)
  • Max speed: 73.4 km/h
  • Total Time: 37:00:00 (Yes, exactly 37 hours)
  • Moving time: 27:43:49
  • Time stopped: 9:16:11 (from which 3 hours were sleeping)
  • Global avg speed: 16.94 km/h
  • Consumed calories: 13,076
  • Avg Heart Rate: --
  • Max Heart Rate: --
  • Avg Cadence: --
  • Max Cadence: --
  • Max Power: 580w
  • Norm Power: 140w
  • My bike has: 22,711.20 Km
  • Link to Strava: http://app.strava.com/activities/55245726
Update 1/6/2013
Alberto's report can be found at Bryan Chapman Memorial 600: the rider experience.

A video from one of the riders. I love the way it shows the Audax spirit and how everyone is smiling (I appear at 5:51).

Take care
Javier Arias González

domingo, 12 de mayo de 2013

Severn Across 400 - English

Severn Across 400
3:45am and it is time to wake up.

I had a hard time trying to sleep. This was going to be my third 400K, the last one I rode was the Hailsham 400, two years ago. Serious stuff.

In my opinion a 400 is the hardest of the Audax distances, even harder than the 600. In the 600 you have time to stop and get some sleep, but in the 400 you ride straight for 24 hours, that's a lot of hours on the bike, many of them riding during the night and sleep depraved (and I ride without caffeine). It was inevitable the excitement make it difficult to sleep the night before.
Big breakfast
Pasta salad, muesli with milk and chocolate milk with cookies. A big breakfast a 4:00am.  Letting the body know this is going to be an unusual day.
Chalfont St Peter community center
At Chalfont St Peter's community center someone mentioned we had wind from the west, that would be mostly mean head wind the first half and mostly tail wind in the second half. I deal I would have never signed to but I didn't have a say on it.

The plan was the same plan I have for all brevets this year. Ride the first 200K as hard as possible to train for the Quebrantahuesos and then survive the rest to train my body to ride when tired for the London-Edinburgh-London (1,400km in les than 5 days).

6:00 am sharp around 40 riders were set off. Very soon I found myself riding at very good pace and, also, that the heart rate monitor not working. 30Km/h the first hour and 30Km/h the second hour. By the time I got to the first control (Km72) my average speed was 28.8km/h, not bad.

The first control was in a caffe so I felt compelled to order something. Hot chocolate it was. Luckily it was not very hot so very soon I was on the go again.

Next control was in Km 145.4 I arrived at 11:30 which meant I have riden at more than 26km/h including stops. That's a great pace for a brevet. The control was again in a caffe so, again, I ordered a hot chocolate and a scone. The hot chocolate was very good, but the scone was definitively the the best scone I ever had. Make mental note of the place for future reference, Bay Tree teashop in Tewkesbury
The best scone I ever had
I was enjoying the scone when I saw a call from the office. Something went wrong in one of our systems and it required my attention. Eeeermmm!! I don't think so, I'm riding a 400K, at this moment in the middle of nowhere and I don't plan to finish until the am. Call someone else! I guess it sounded too unreal to be a made up excuse.

Next control was in Km 186.5, it was an info control. At the junction, distance to Coleford. But when I arrived at the junction I saw two cyclists stopped, I slowed down to see if they needed help but it looked like they were just chatting so I carried on. Only to realize a kilometer later that was the control and they were just writing down the answer. I slowed down a bit and waited for them to catch me and when they arrive I asked them the answer to the question (9 miles). "Cheating" is acceptable to prevent riding back, even a single kilometer.

Only 32k to the next control in km 218.4 but they were very intense. For started it started to rain very heavily. Then I pushed it until the 200k mark where I marked a lap (7:44 excluding stops, I'm going to need a miracle to reduce 45 minutes in the same distance, but adding 1,700m of climb, at the Quebrantahuesos). And then, for the last 18k I struggled in every single ramp I found on the road. I was empty.

Soaked, tired, cold and hungry. A pasta salad, doritos, chips, a chocolate bar, a banana, orange juice and 1.5 liters of water helped to fill the tank. 30 mins stop helped to recover my legs a bit. A chat with a fellow rider confirming that we were going to have tail win after we crossed the bridge helped to recover the spirit. I had 200 more to go...
Calorie rich meal
Very, very, very slowly I headed to the Severn bridge. The sun was now shining, there was a climb, that in normal conditions I would not even mention, but now it almost killed me. Out of breath and sweating I got to the top and easy pedaled to the bridge crossing it veeeery slowly, enjoying the views.

Severn bride ahead
And everyone was right. A couple of kilometers after the bridge the route turned left and the wind became a tail wind.

Aleluya!!! I was still riding very slowly but the wind was pushing me so my average speed was very decent. Of course the moment the road started to climb I was in my small chainring, loading a 28 and crawling up at 10km/h; but the road was flat enough to allow me a good average speed. From 200K to 300K in 4:12, almost 24km/h. A shame that rained, again very heavily, in the last kilometers to the next control (314Km) (I like it when controls are separated, it helps to reduce the stops).

This control was in a service station. Again soaked, again cold and even more tired now. Time to eat the rest of the pasta salad, another hot chocolate, another orange juice and a cake. It was hot inside, it was cold, dark and rainy outside. Another 30mins stop. When I was preparing myself to go I almost cried, I didn't want to go out.

But there was a miracle. By the time I was on the bicycle the rain stopped. The wind also stopped but that was a deal I was willing to accept. 100km to go, riding on the night, it was 20:30, I was expecting to finish around 1:00 am.

The last 100 were mostly flat. There was still a small hill every now and then that got me crawling, specially after the 28 refused to load, but overall I manage to keep a good pace despite my empty legs and being riding in the night. Unfortunately in one descend I hit a pothole. It was a pretty strong hit, I felt the pain in my arms, but everything seemed all right. I kept riding for about 200 meters until I realized the light was not working. Stopped to see the dynamo got disconnected, when I was trying to connect it back I hear the wheel deflating. And that was not all, when I went to grab the pump I realized it was missing, sure it was expeled by the hit with the pothole.

I walked back but couldn't find the pump. Luckily another rider arrived and he stopped to ask if I needed anything. He lend me his pump and soon enough I was ready to go. He asked me if I wanted him to wait for me just in case I had another puncture, but I said it was not necessary, there were more riders behind so if I had another puncture it was a matter of waiting for the next one. So there he went, and a few seconds later he shouted "I found the pump!". Lucky me, but lesson learned, next time the pump in the bag, not in the frame.

It took me 4:24 from 300K to 400K. Not impressive, but not that bad either. I was almost there.

And suddenly my Garmin 800 turned off. I tried to turn it on but it wouldn't. It started to load the maps but then it was going off again. I knew it was not the battery because the dinamo was powering it. I was not worried about the navigation, although the Garmin is very convenient, specially in the night, but about the data I was losing. I hate when I lose data from my rides.

I made it back to Chalfont St Peter's community center at 1:00 am. I was really, really tired. I think I was more tired than any of the brevets I have riden, including Paris Brest Paris. Still I was happy, really happy. I have ridden 400Km in 19 hours, that was 4 hours and a half faster than fastest 400K. Audax is not racing and, certainly, pushing it in the first 200k and the lucky of being rescued by the tail wind in the third quarter helped for a fast ride, but, hey, good numbers are always sweet.

Happy finisher
I had a glass of milk and a few cookies and soon enough I was heading home. Left the bicycle in the car, had a quick shower, another glass of milk and by 2:30 I was ready to sleep. I still had time to question whether my strategy will be wise next weekend (riding a 600K with 8,300m climb) and to remember that I have to make sure my 28 works again for that ride, 0.001 seconds later I was deep sleep.


numbers, numbers, numbers:
  • Kilometers: 413.14
  • Climbing: 3,884 pretty flat ride
  • Moving Avg speed: 25.04 km/h
  • Max speed: 67.9 km/h
  • Total Time: 19:00:00
  • Moving time: 16:29:47
  • Time stopped: 2:30:13
  • Global avg speed: 21.74 km/h
  • Consumed calories: 9,600
  • Avg Heart Rate: --
  • Max Heart Rate: --
  • Avg Cadence: 79
  • Max Cadence: 202 (which is obviously an error)
  • Max Power: 626
  • Norm Power: 196
  • My bike has 22,084.3 km
  • Link to Strava: http://app.strava.com/activities/53843346
Take care
Javier Arias González

Severn Across 400 - Español

Severn Across 400
3:45am y hora de levantarse

Me había costado dormirme. Este iba a ser mi tercer 400, el último que había hecho, el Hailsham 400, había sido hace dos años.

En mi opinión los 400 son los brevets más duros, más incluso que los 600. En un 600 tienes tiempo para parar y dormir, pero en un 400 acabas rodando 24 horas seguidas; eso son un montón de horas en la bicicleta y muchas de ellas las ruedas con sueño (yo no tomo cafeína). Era inevitable que la perspectiva no me dejase dormir la noche anterior.
Impresionante desayuno
Ensalada de pasta, muesli con leche y cola cao con galletas. Desayuno en tres etapas a las 4:00 de la mañana. Haciéndole saber al cuerpo que el día iba a ser especial.

El community center de Chalfont St Peter
En el community center de Chalfont St Peter alguien comentó que el viento era del oeste y eso significaba que sería mayormente de cara en la primera mitad y mayormente de culo en la segunda mitad. Un trato que yo nunca hubiese firmado, pero estaba claro que yo no tenía voto en ese tema.

El plan era el mismo plan que tengo para todas las brevets de este año. Rodar los primeros 200K lo más rápido posible para entrenar para la Quebrantahuesos y después sobrevivir el resto de la ruta para entrenar a mi cuerpo a rodar cuando está cansado para la Londres-Edinburgh-Londres (1.400Km en menos de 4 días).

A las 6 en punto unos 40 ciclistas nos pusimos en marcha. Muy pronto me encontré rodando a muy buen ritmo y, además, que el monitor del pulso no funcionaba. 30km/h en la primera hora y 30km/h en la segunda, para cuando llegamos al primer control (km 72) mi velocidad media era de 28.8km/h, no estaba mal.

El primer control era en un café por lo que me sentí obligado a tomar algo. Me pedí un chocolate caliente. Por suerte no estaba muy caliente por lo que enseguida ya estaba en marcha.

El siguiente control era en el km 145.5 y llegué a las 11:30, lo que significa que había rodado a más de 26km/h incluyendo paradas. Ese es un ritmo muy alto para una brevet. El control estaba otra vez en un cafe por lo que, otra vez, me pedí un chocolate caliente y un scone. El chocolate estaba muy bueno, pero el scone era el mejor scone que me había tomado en mi vida. Estaba buenísimo. Tomé nota mental del sitio para tenerlo en cuenta en el futuro, Bay Tree teashop en Tewkesbury
El mejor scone que me he comido
Estaba disfrutando de mi scone cuando vi que tenía una llamada de la oficina. Algo había ido mal en uno de nuestros sistemas y me preguntaban si podía echar un vistazo. Estooooo, pues va a ser que no, estoy rodando 400K, ahora mismo en medio de la nada y no pienso acabar hasta la madrugada, vas a tener que llamar a otro. Supongo que debió sonar demasiado irreal para ser una excusa inventada.

El siguiente control era en el Km 186.5 era un info control, teníamos que tomar nota de la distancia a Coleford desde un determinado cruce. Pero cuando llegué al cruce vi que había dos ciclistas parados, reduje mi velocidad para ver si necesitaban algo, pero me di cuenta que estaban simplemente hablando por lo que seguí mi camino. Claro que un kilómetro más tarde caí en la cuenta que ese era el control y que estaban escribiendo la respuesta. Reduje mi velocidad para dejar que me alcanzasen y cuando llegaron a mi altura les pregunté la respuesta (9 millas). "Hacer trampas" está permitido para evitar tener que rodar hacía atrás, incluso aunque sea un sólo kilómetro.

Sólo 32K para el siguiente control en el kilómetro 218.4 pero fueron intensos. Para empezar empezó a llover con mucha fuerza. Luego lo dí todo hasta el kilómetro 200 donde marqué tiempos (7:44 sin incluir paradas, voy a necesitar un milagro para reducirle a ese tiempo 45 minutos en la misma distancia, pero añadiendo 1.700 metros más de desnivel, en la Quebrantahuesos). Y luego, en los últimos 18km me arrastré en cada cuesta que me encontré en la carretera. Estaba vacío.

Empapado, cansado, con frío y hambriento. Una ensalada de pasta, doritos, patatas fritas, una barra de chocolate, un plátano, zumo de naranja y 1,5 litros de agua me ayudaron a llenar el buche. 30 minutos de parada me ayudaron a recuperar un poco las piernas. Una conversación con un compañero de ruta que me confirmó que íbamos a tener viento de culo una vez cruzásemos el puente me ayudó a recuperar el ánimo. Me quedaban 200 kilómetros...

Comida rica en calorías, no apta para dietas
Muy, muy, muy despacio me dirigí al puente de Severn. Ahora brillaba el sol y una rampa que en condiciones normales ni siquiera citaría casi me mata. Sin aliento y sudando llegué a la cima y pedaleando suavemente crucé el puente disfrutando de las vistas.

El puente de Severn al fondo
Y todos tenían razón. Unos kilómetros después del puente la ruta giró a la izquierda y el viento empezó a dar de culo.

¡¡¡Aleluya!!! Yo rodaba muy despacio, sin hacer esfuerzo, pero el viento me empujaba y mi velocidad media era muy decente. Por supuesto en el momento que la carretera se inclinaba lo más mínimo tenía que meter plato pequeño y el 28 para arrastrarme a 10 km/h, pero la carretera era suficientemente llana para una buena velocidad. Del kilómetro 200 al 300 tardé 4:12, casí 24 km/h. Una pena que lloviese, otra vez con mucha fuerza, en los últimos kilómetros hasta el siguiente control (314K) (me encanta cuando los controles están separados unos de otros, ayuda a reducir el número de paradas)

Este control era en una gasolinera. Otra vez empapado, otra vez helado y ahora más cansado. Hora de comerme el resto de la ensalada de pasta, otro chocolate caliente, otro zumo de naranja y un pastel. Dentro hacía calor, pero fuera hacía frío, estaba oscuro y llovía. Otros 30minutos de parada y cuando me estaba preparando para ponerme en marcha casi me pongo a llorar. No quería salir.

Pero, de repente, un milagro. Fue subirme a la bici y paró de llover. El viento también paró, pero ese era un buen trato. Me quedaban 100Km rodando en la oscuridad. Eran las 20:30, calculaba que llegaría sobre la 1:00 am.

Los últimos 100 kilómetros eran mayormente llanos. Todavía apareció de vez en cuando una colina que hizo que me arrastrase, más cuando el 28 se negó a entrar más, pero en general conseguí mantener un buen ritmo a pesar de tener las piernas vacías y estar rodando de noche. Por desgracia en un descenso metí la rueda delantera en un bache. Fue un impacto muy fuerte, incluso me hizo daño en los brazos pero parece que la bici estaba bien. Seguí rodando unos 200 metros hasta que me di cuenta que la luz había dejado de funcionar. Me paré y vi que el dinamo se había desconectado, cuando estaba conectando el dinamo oí que la rueda se desinflaba y cuando fui a coger la bomba me di cuenta que no estaba en el cuadro de la bici, seguramente había saltado por la fuerza del bache que había cogido. ¡Qué rápido pueden torcerse las cosas!

Caminé hacia atras pero no encontré la bomba. Por suerte otro ciclista llegó y se paró a preguntar si necesitaba algo. Me dejó su bomba y en enseguida estaba dispuesto para ponerme en marcha. Me preguntó si quería que me esperase por si tenía otro pinchazo pero le dije que no, había muchos ciclistas por detrás, si tenía otro pinchazo era sólo cuestión de esperar al siguiente. Al poco de ponerse en marcha le oigo chillar "¡encontré la bomba!". Mira que suerte; aun así, lección aprendida, la bomba en la bolsa, no en el cuadro.

Me llevó 4:24 del kilómetro 300 al 400. Nada impresionante, pero tampoco estaba tan mal. Ya estaba llegando.

Y de repente el Garmin 800 se apagó. Intenté encenderlo pero no se encendía. Empezaba a cargar los mapas pero se volvía a apagar. Sabía que no era la batería porque el dinamo lo alimentaba. No me preocupaba por la navegación, aunque el Garmin es muy cómodo, especialmente de noche, pero me fastidiaba estar perdiendo datos. Odio cuando se pierden datos de una ruta.

Y llegué al community center de Chalfont St Peter, era la 1:00 am. Estaba realmente muy, muy cansado. Pienso que es el brevet al que llegué más cansado, incluida la París Brest París. Pero estaba contento. Había rodado 400Km en 19 horas, 4 horas y media más rápido que mi 400 más rápido. En los brevets no se trata de correr y esta claro que haber apretado en los 200 kilómetros y la suerte de haber sido rescatado por el viento en el tercer cuarto habían ayudado, pero, hey, unos buenos números siempre quedan bien.

Happy finisher
Me tomé un vaso de leche y un par de galletas y enseguida me volví a casa. Dejé la bicicleta en el coche, me pegué una ducha rápida, otro vaso de leche y a las 2:30 ya estaba listo para dormir. Todavía tuve tiempo para plantearme si mi estrategia será muy inteligente para el próximo fin de semana (600K con 8.300m de desnivel) y recordar que tengo que asegurarme de que el 28 vuelve a entrar para esa ruta; 0,0001 segundos después estaba dormido.



Número, números, números:
  • Kilómetros: 413.14
  • Desnivel: 3,884 pretty flat ride
  • Vel media en movimiento: 25.04 km/h
  • Vel Max: 67.9 km/h
  • Tiempo total: 19:00:00
  • Tiempo en movimiento: 16:29:47
  • Tiempo parado: 2:30:13
  • Vel media global: 21.74 km/h
  • Calorías consumidas: 9,600
  • Frec cardiaca media: --
  • Frec cardiaca max: --
  • Cadencia media: 79
  • Cadencia max: 202 (que obviamente es un error)
  • Potencia max: 626
  • Potencia normalizada: 196
  • Mi bicicleta tiene 22,084.3 km
  • Link to Strava: http://app.strava.com/activities/53843346
A cuidarse
Javier Arias González